Fallecen las 57 personas que viajaban en un avión tras estrellarse en Turquía
Desapareció de los radares de control cuando se disponía a aterrizar en el Aeropuerto Suleyman Demiral de Isparta
ANKARA Actualizado: GuardarCincuenta y siete personas han muerto hoy en Turquía al estrellarse el avión en el que viajaban cuando se disponía a aterrizar en la provincia de Isparta (suroeste), sin que haya supervivientes ni entre los pasajeros ni entre la tripulación. El avión pertenece a la aerolínea de bajo coste Atlasjet.
El avión, un MacDonnell Douglas 82, salió de Estambul con 49 pasajeros y siete tripulantes -dos pilotos, cuatro azafatas y un técnico- y desapareció de forma sorpresiva de la pantalla del radar a las 03.12 hora local (01.12 GMT), poco después de que el piloto comunicase que descendía para aterrizar en el aeropuerto de Isparta. En principio se habían contabilizado 56 fallecidos pero posteriormente se ha informado de la muerte de un bebé con lo que el total de víctimas sería de 57 personas.
Las condiciones meteorológicas eran buenas en el momento de aterrizar. No había lluvia, nieve o tormentas en el lugar de destino del avión ni éste tenía problemas técnicos. La compañía asegura que los pilotos eran "experimentados". Por tanto, hay que esperar a que se descifren las cajas negras para conocer las causas del accidente que los expertos califican como "muy extraño".
El ministerio de Transporte ha hecho público un comunicado en el que afirma que el fuselaje del aparato fue localizado por helicópteros de rescate en una montaña de 1.830 metros de altura cercana al pueblo de Cukuroren, a 12 kilómetros del aeropuerto.
Pilotos experimentados
"Un helicóptero pudo aterrizar junto a los restos del avión. Los equipos de rescate lograron llegar allí. Desgraciadamente, nadie está vivo. Dios los bendiga", ha dicho el presidente de la compañía privada Aerolíneas Atlasjet, Tuncay Doganer.
"El accidente parece increíble. El avión vio el aeropuerto y luego desapareció. Los pilotos tenían mucha experiencia. Todo estaba normal. La gran cuestión es cómo se estrelló con tan buen tiempo y con todo tan normal", añadió.
El avión había sido alquilado a la compañía World Focus Airlines y -según Doganer- nunca había registrado problemas técnicos, si bien partió de Estambul con un retraso de hora y media. "El retraso no tuvo nada que ver con ningún problema técnico", ha asegurado el presidente de la aerolínea. "Suponiendo que se hizo una revisión correcta del avión, estamos ante un fallo humano", ha explicado Cebeci, quien alertó sobre la falta de supervisores de aviación civil en Turquía.
Tanto en Estambul como en Isparta se han instalado centros de crisis para atender a los parientes de los pasajeros.