Mohamed VI condena la «lamentable» visita de los Reyes
El monarca ha enviado un comunicado previo a su discurso con motivo del aniversario de la Marcha Verde donde no ha mencionado la visita real
MADRID Actualizado: GuardarEl Rey Mohamed VI de Marruecos ha manifesado en un comunicado previo a su discurso televisivo su "condena" y "denuncia" de la visita "lamentable" de los Reyes de España a las ciudades autónomas españolas de Ceuta y Melilla. El monarca marroquí califica la visita real de "paso contraproducente" que "ataca los sentimientos patrióticos sólidamente arraigados entre todos los componentes y sensibilidades del pueblo marroquí".
En un comunicado distribuido una hora antes del discurso oficial del rey, Mohamed VI califica la visita real de "acto nostálgico de una era sombría y decididamente superada". "Hay que hacer que las autoridades españolas asuman su responsabilidad en cuanto a las consecuencias (de la visita) que podrían poner en peligro el futuro y la evolución de las relaciones entre los dos países", según el texto del comunicado.
Mohamed VI afirma que la visita constituye una "flagrante falta de respeto por parte del Gobierno español de la letra y el espíritu del Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación de 1991".
El Ministerio de Asuntos Exteriores ha expresado su comprensión por la "sensibilidad" de Marruecos y del rey Mohamed VI respecto a la cuestión de Ceuta y Melilla, aunque le ha pedido que esta "divergencia" no afecte a la buena relación bilateral. Exteriores ha respondido así al comunicado de Mohamed VI hecho público hoy en el que manifiesta su "condena" y "denuncia" de la visita "lamentable" de los Reyes de España a Ceuta y Melilla, que califica de "paso contraproducente".
Exteriores cree que esta "clara divergencia" debe ser gestionada por ambas partes "sin perder de vista la profundidad de la relación bilateral y la común necesidad de seguir aunando esfuerzos para hacer frente a los desafíos del futuro". "Por nuestra parte, vamos a hacer todo lo posible para que este problema se pueda superar cuanto antes", han añadido las mismas fuentes.
El rey Mohamed VI de Marruecos ha eludido, sin embargo, la mención a la visita de los Reyes de España a Ceuta y Melilla en su discurso de conmemoración del 32 Aniversario de la Marcha Verde, mediante la cual el país se anexionó el Sahara Occidental. Este aniversario de la 'Marcha Verde', considerado un hito histórico por el nacionalismo marroquí, coincide con el revuelo provocado en la clase política y en la sociedad marroquí por la visita institucional de los Reyes de España a las Ciudades Autónomas de Ceuta y Melilla. Sin embargo, el rey Mohamed VI ha preferido no mencionar la visita real a las ciudades autónomas en el discurso aunque horas antes ha enviado un comunicado oficial condenando el viaje de los Monarcas.
Una visita histórica
La multitud ha tomado la Plaza de España de Melilla para dar la bienvenida a los Reyes en la que es su primera visita a la ciudad autónoma desde hace 32 años. Al igual que ayer en Ceuta, las banderas de España han poblado las calles en un clima de euforia general. Tras retirar por un tiempo indeterminado a su embajador en España, Marruecos insiste en considerar el viaje una "provocación inadmisible".
Los monarcas han llegado pocos minutos después de las 12.00 horas a la céntrica plaza melillense, donde han sido recibidos por las autoridades locales encabezadas por el presidente autonómico, Juan José Imbroda, y el delegado del Gobierno, José Fernández Chacón. Imbroda ha entregado el Bastón de Mando de la Ciudad a Don Juan Carlos y toda la delegación ha accedido al Palacio de la Asamblea, marco de los discursos institucionales.
Tras tomar la palabra, Don Juan Carlos ha subrayado su compromiso con las ciudades autónomas del norte de África, como hizo ayer en Ceuta: "No podía dejar más tiempo sin venir para expresaros nuestro afecto y apoyo", ha destacado el Monarca. "Como Rey que se debe a todos los españoles, tenía contraído el compromiso de visitar Melilla junto con la Reina. Un compromiso al que se unía un profundo deseo", ha añadido.
A pesar de la airada reacción del Reino alauí, el Gobierno confía en que la visita Real a Ceuta y Melilla no altere las "muy buenas" relaciones que existen con Marruecos. El día en que se produjo el anuncio del viaje de los Reyes (el miércoles por la tarde) fuentes oficiales enmarcaron la decisión en el deseo que siempre ha tenido el jefe del Estado de desplazarse a Ceuta y Melilla, algo que había transmitido en privado a los sucesivos mandatarios de ambas ciudades, pero ningún gobierno de UCD, PSOE y PP se había atrevido a organizarlo por temor a una crisis diplomática. Las autoridades de Marruecos, que reclaman la soberanía de ambas plazas, expresaron su enfado en términos muy duros y subrayaron que la fecha elegida "no es casual", extremo negado por las españolas.
El Gobierno confía en que la visita "no pasará factura"
Terminada la gira, el Gobierno ha expresado su satisfacción por el resultado de las visitas y ha recalcado su carácter "interior". El ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que ayer mantuvo una reunión informal en el marco de la cumbre Euromediterránea de Lisboa con su homólogo marroquí, Taeib Fassi-Fihri, dijo que "hay que ser respetuosos con las posiciones divergentes respecto a Ceuta y Melilla" y rechazó hacer predicciones sobre posibles presiones futuras del país vecino.
A pesar del enfado alauí, fuentes diplomáticas apreciaron signos "positivos" como el escaso seguimiento que tuvieron las manifestaciones y las peticiones de parte de la prensa alauí de normalizar la relación. Por ello, confiaron en que la visita "no pasará factura".
Rechazo del Parlamento marroquí
Ayer, en una sesión extraordinaria en la Cámara de Representantes, todos los grupos y formaciones parlamentarias marroquíes coincidieron en definir la visita de los Reyes de España a Ceuta y Melilla como una "provocación" y señalaron "la necesidad de recuperar las dos ciudades para reparar la integración del Reino de Marruecos y acabar con la colonización", informó la agencia MAP.
La sesión estuvo marcada por el discurso del primer ministro, Abbas el Fassi, que calificó de "inadmisible" e "inoportuna" la visita y advirtió de que el pueblo marroquí "continuará movilizando sus propios medios para recuperar las dos ciudades ocupadas y las islas cercanas". Además, indicó que esta visita, que "hiere los sentimientos del conjunto del pueblo marroquí", "no cambiará la realidad, que se centra en la pertenencia histórica, geográfica y jurídica de las dos ciudades y de las islas mediterráneas a Marruecos", así como "el derecho inalienable, legítimo e indiscutible de Marruecos a recuperar sus tierras".
Además, cerca de mil personas se concentraron en la frontera que separa Melilla de Marruecos para protestar por esta visita y defender la "marroquinidad" de esos territorios. La concentración se ha realizado en la llamada "tierra de nadie" del puesto fronterizo de Beni-Enzar, zona controlada por Marruecos. Los asistentes portaron pancartas en las que se podía leer "Ceuta y Melilla, ciudades expoliadas" y gritaron consignas en árabe en las que decían "Juan Carlos, no; un solo rey, Mohamed VI".