Las mejores producciones de la escena teatral andaluza se dan cita en El Puerto

Durante los próximos cuatro días -del 6 al 9 de noviembre- se presentarán en El Puerto las últimas producciones de las mejores y más prestigiosas compañías de teatro de la comunidad. 21 espectáculos que se escenificarán en distintos espacios de la ciudad y que se enmarcan en la programación de la I Muestra de Teatro Andaluz, un certamen que aglutina espectáculos de calle, teatro infantil y propuestas para todos los públicos. Los grupos Teatro del Mentidero y El Carromato conforman la presencia gaditana del festival, que arrancó ayer por la tarde de la mano del pasacalles A cuadros, un espectáculo itinerante de Vagalume Teatro que hizo las delicias de los más pequeños a su paso por las céntricas calles de la localidad. Tras su representación en el Festival Iberoamericano de Teatro de Cádiz, la agrupación jerezana La Zaranda llevó anoche su obra Los que ríen los últimos al recién estrenado Teatro Municipal de El Puerto.

Estrenos absolutos

Cuatro de las formaciones -Teatro Crónico, Ekilikua Teatro, Teatro del Impostor y Hombre de Piedra- participantes en la Muestra estrenarán por primera vez sus montajes en el marco del certamen. Los componentes de Teatro Crónico llevarán esta tarde La loca historia de Macbeth a las tablas de la Sala San Luis, una historia que servirá para reflexionar acerca de la moralidad de los que destruyen la legalidad establecida cuando es justa y está aceptada por la mayoría. Por su parte, Ekilikua escenificará en la Bodega de las 7 Esquinas Bernarda Calva, la original revisión de la obra de Lorca de tres hilarantes clowns.

Otro de los estrenos absolutos será Los hijos del sol, un espectáculo infantil basado en la técnica de la luz negra a cargo de Teatro del Impostor. Asimismo, la compañía Hombre de Piedra presentará un texto del sorprendente dramaturgo Fernando Mansilla, Hamburguer de conejo.

La I Muestra de Teatro Andaluz convierte El Puerto en escaparate de la escena teatral regional, un espacio en el que tienen cabida desde los montajes convencionales a las propuestas más vanguardistas e innovadoras. Un encuentro cultural que favorece el contacto directo entre grupos consagrados y noveles, donde los programadores tendrán también un papel relevante.