ANDALUCÍA

Un funcionario resulta herido en el tercer intento de motín en la cárcel de Córdoba

El Centro Penitenciario de Córdoba fue ayer el escenario por tercera vez en un año de un intento de motín protagonizado por varios internos y que acabó con un funcionario de prisiones herido y otros contusionados.

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El intento de motín tuvo lugar en los módulos 12 y 14 de la cárcel cordobesa, aunque ha sido en el último de ellos donde se produjeron los incidentes más graves, ya que en el mismo los internos amotinados «han roto todos los cristales, resultando un funcionario herido de un pinchazo». Al menos siete presos están aislados y se espera que sean trasladados a otros centros penitenciarios.

Explicación oficial

La directora de la prisión cordobesa, Ana Martín, aclaró que el funcionario resultó «herido por arma blanca» en un hombro y «está de baja», tras ser atendido por el facultativo de la prisión, que también diagnosticó «contusiones» de carácter leve en otros cuatro funcionarios, «que han podido continuar trabajando», y todo ello como consecuencia un «incidente regimental muy grave, aunque aislado y surgido de forma espontánea, que, gracias a la profesionalidad de los funcionarios , del jefe de servicio y del subdirector de Seguridad, se consiguió atajar, evitando así mayores consecuencias».

Los hechos, según el relato de Martín, se iniciaron sobre las 9.00 horas de ayer, cuando «un interno del módulo 12 intentó salir del mismo hacia los jardines comunes del centro penitenciario, aprovechando para ello la apertura de la puerta para sacar la basura, agrediendo a patadas a los funcionarios que le avisaron de que no debía salir, por lo que se aisló al interno, tras lo cual otros internos del módulo 12, uno de ellos portando un pincho de fabricación casera, exigieron la vuelta al módulo del interno ya aislado, desobedeciendo la orden de volver a sus celdas» y enfrentándose a los funcionarios .

Reducidos

En este contexto, «los internos arrancaron sillas de la sala de día del módulo», aunque los funcionarios lograron convencer, «me-diante el diálogo», a la mayoría de los presos para que volvieran a sus celdas, «salvo dos internos, que tuvieron que ser reducidos, alcanzando uno de ellos con un pincho a un funcionario en un hombro cuando luego era trasladado a aislamiento». Junto a ello, en el módulo 14, el hermano del cabecilla del intento de motín en el módulo 12, «se mostró también muy agresivo e intentó que le secundaran, sin conseguirlo, otros internos de su módulo, siendo reducido y aislado».