El clero italiano compra el Ancona para «hacerlo ético»

l diario Sport se hacía ayer eco de una curiosa noticia. Si hace unos meses impulsó la Liga vaticana, ahora la Iglesia ha decidido comprar el Ancona. Los jugadores y aficionados deberán someterse a un código estricto y los beneficios se destinarán al Tercer Mundo. El equipo se ha impuesto un código ético para poner coto a la violencia e intolerancia. Los jugadores que cometan en el campo faltas graves o que llamen la atención por malas actitudes deberán prestar varias horas de trabajo benéfico. Las entradas son muy económicas, aunque para obtenerlas los aficionados deben renunciar a exhibir pancartas ofensivas con el adversario.